
Estela Maris Valenzuela
DIVERSIDAD, PATRIMONIO Y EDUCACIÓN: VINCULACIONES
LA ENSEÑANZA DEL PATRIMONIO EN CONTEXTO DE DIVERSIDAD LINGÜÍSTICA Y
CULTURAL.
conocimientos y técnicas que las comunidades y los individuos reconocen como parte de su
patrimonio cultural. Éste se transmite de generación en generación y es recreado,
constantemente, por las comunidades y grupos en función de su ambiente, su interacción con
la naturaleza, el paisaje y su historia, generando un sentimiento de identidad y continuidad. El
patrimonio intangible está constituido por aquella parte invisible que reside en el espíritu
mismo de las culturas. Cabe advertir que existen sociedades que han concentrado su saber y
sus técnicas, así como la memoria de sus antepasados, en la tradición oral
Forman parte del patrimonio intangible también, las artes, la música tradicional, las danzas
religiosas, los bailes festivos, los trajes que identifican a cada región, la gastronomía, los
mitos, leyendas; las adivinanzas, canciones de cuna; los cantos de amor; los dichos, los juegos
infantiles; las creencias, la medicina tradicional, los rituales, las fiestas, los saberes, los
conocimientos, las cosmologías, los sistemas de conocimiento, las creencias, los valores, etc.
que constituyen la expresión de identidad de un pueblo o grupo étnico o social, en suma, sus
formas de vida.
Respecto del patrimonio viviente para la UNESCO, los "Tesoros Humanos Vivientes"... "son
personas que encarnan, que poseen en su grado más alto, las habilidades y técnicas
necesarias para la producción de los aspectos seleccionados de la vida cultural de un pueblo
y para la existencia continua de su patrimonio cultural material”. Así, ameritan ser
considerados como parte del patrimonio cultural viviente aquellas personas o grupos que
desde el campo de la música, la danza, la literatura, las artes plásticas, las artesanías, la
educación hayan realizado un aporte significativo a la cultura.
Patrimonio abarcaría entonces el conjunto de obras y valores de carácter colectivo, que
pertenecen a la comunidad y, en última instancia, a la humanidad en su conjunto, de carácter
material o inmaterial, y que constituyen bienes difícilmente repetibles o reproducibles: están
vinculados inseparablemente a un lugar y/o a una cultura. Estos bienes son preservados
porque individuos o la sociedad, a través de las organizaciones creadas o no para ello, les
confieren algún significado especial, ya sea estético, documental, histórico, educativo o
científico (Krebs y Schmidt-Hebbel, 1999).
Arévalo (2004) advierte que todo lo que se aprende y transmite socialmente es cultura, pero
no patrimonio. Los bienes patrimoniales constituyen una selección de los bienes culturales, de
tal modo que el patrimonio está compuesto por los elementos y expresiones relevantes y
significativas culturalmente. Desde este punto de vista el patrimonio posee un valor étnico, y
simbólico, pues constituye la expresión de la identidad de un pueblo y de sus formas de vida.
En esta misma línea de pensamiento patrimonio, comprende la selección de los bienes
culturales que está compuesto por los elementos y las expresiones más relevantes y
significativas culturalmente, remite a símbolos y representaciones, a los lugares de la
memoria, a la identidad. Parte de la identidad de un grupo social está dada por su patrimonio,
que es la expresión de su origen, su estilo de vida, costumbres, su cultura, su memoria